lunes, 31 de marzo de 2014

El estrés puede causar infertilidad en las mujeres



Los científicos del Centro Medico Werner de la Universidad del estado de Ohio ( Estados Unidos), demostraron mediante un estudio realizado a 501 mujeres, que los altos  niveles de estrés tienen gran influencia en la infertilidad.

Las participantes, mujeres  entre 18 y 40 años, libres de problemas de fertilidad y con la decisión de tratar de concebir, fueron seguidas durante 12 meses antes de quedar embarazadas. Se recogieron muestras de saliva a la mañana siguiente de la inscripción en el estudio, y  después, al día posterior al inicio de su ciclo menstrual. Para medir el estrés se apoyaron en el análisis de la presencia de dos hormonas en la saliva de las mujeres, el Cortisol y la Alfaamilasa, dos biomarcadores  de estrés. Llegaron a la conclusión que las mujeres que tienen un nivel alto de estos biomarcadores tienen menor posibilidad de quedar embarazadas en comparación a las mujeres con bajo nivel de estas hormonas. Este estudio publicado en la última edición de Human Reproduction, señala que el estrés  pre-concepcional en la mujer , medido a través de los biomarcadores , les reduce en 29% las posibilidades de concebir en un año, y tienen más del doble de posibilidades de padecer infertilidad. Vale la pena señalar  que se trata del primer estudio (estadounidense) que demuestra una relación prospectiva entre la presencia de marcadores de estrés en la saliva y un mayor tiempo para lograr un embarazo, además de ser el primer trabajo que asocia a los mismos con la infertilidad. 

Se recomienda a las mujeres que estén pasando por dificultades para quedar embarazadas, a considerar el manejo de su estrés mediante diferentes técnicas como el yoga y  la meditación. Las parejas no deben culparse a sí mismas si están experimentando problemas de fertilidad ya que el estrés no es el único factor involucrado en la capacidad de la mujer para concebir. 

jueves, 27 de marzo de 2014

Encuentran origen genético de la Falla Ovárica Pematura


Científicos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas de la Universidad de Salamanca hallaron el motivo genético que  causa la Falla Ovárica Prematura (FOP) en las mujeres. Esta patología, que afecta a una de cada 100 mujeres, provoca la pérdida de la función ovárica años antes de la menopausia.

Los científicos analizaron el código genético de una familia consanguínea de Medio Oriente donde se presentaron varios casos de infertilidad entre sus miembros y hallaron que una región en el cromosoma 7q21 que tiene importantes vínculos con la FOP.

Tras la secuenciación del exoma, la fracción del genoma que codifica las proteínas, del ADN proporcionado por dos hermanas dentro de esta familia, una de ellas sana y la otra infértil, hallaron una pérdida de una sola base del gen que codifica a la proteína STAG3, subunidad del complejo de cohesina.

Este estudio permite relacionar las mutaciones en un gen del complejo de cohesina con la infertilidad. Además ha descubierto una relación entre la azoospermia, trastorno que disminuye la producción de espermatozoides, y la Falla Ovárica Prematura pues asegura que serían las dos caras: masculina y femenina, de la misma enfermedad  genética.

Al respecto, el doctor Giovanni Casafranca, especialista en reproducción humana de la Clínica de Fertilidad PROCREAR, este es un gran paso para la medicina reproductiva porque hasta el momento la mayoría de casos de Falla Ovárica Prematura se cataloga como idiopática es decir sin causa clara establecida.

Día a día, la medicina avanza y nos permite conocer más sobre este mal que afecta a tantas personas. Actualmente ya existen métodos por los cuales podemos lograr el ansiado sueño de ser padres. Esperemos que mediante los próximos hallazgos científicos nos den más expectativas positivas respecto al tema.

lunes, 24 de marzo de 2014

La eficacia de la cirugía para combatir la endometriosis





A través del Chequeo Integral Ginecológico podemos detectar diferentes patologías ginecológicas que ponen en riesgo la fertilidad femenina, una de ellas es la  endometriosis, que representa el 6
5% de las causas que impiden el embarazo, siendo corregido por lo general mediante  cirugía.

“Cuando realizamos una ecografía transvaginal podemos detectar diversos marcadores ecográficos que sugerirán la presencia de focos endometriósicos en la cavidad pélvica, y por ende impediría la implantación del embrión que busca desarrollarse de manera normal en el vientre de la paciente”, según manifiesta el Dr. Julio César Dueñas Chacón, director de la Clínica de Fertilidad PROCREAR.

Con respecto a los síntomas de la endometriosis, estos son: dolor pélvico producto de las múltiples adherencias generadas por esta enfermedad, dolores menstruales (dismenorrea), dolor en las relaciones sexuales (dispareunia), menstruaciones con flujo abundante (hipermenorrea), con coágulos y defecaciones dolorosos, entre otros.

En el campo de la salud reproductiva, se recomienda por lo general una cirugía laparoscópica, para corregir la endometriosis. “Durante esta intervención, se pasa un tubo fino con cámara (llamado laparoscopio) a través de una pequeña incisión en el abdomen. Una vez detectadas las lesiones endometriósicas (implantes de tejido endometrial que se encuentran fuera del endometrio) pueden cortarse o quemarse usando una fuente de alta energía, como un láser. Ha quedado demostrando que el uso de la laparoscopía para extirpar tejido enfermo en casos de endometriosis leve mejora la fecundidad”, señala Dueñas Chacón.

Si el grado de endometriosis es severo la paciente tendría que acudir a la reproducción asistida para alcanzar la maternidad. “Si tenemos un grado leve de endometriosis, luego de la corrección por laparoscopía, y si no hay otras causas de infertilidad se alcanzaría un 90% de probabilidades de embarazos, pero si es severo por más que sea operada por la misma intervención, las probabilidades de embarazos son mínimas, por ello se aconseja recurrir a tratamientos de fertilidad como la Fecundación In Vitro”, puntualiza el especialista.

viernes, 21 de marzo de 2014

Las cauterizaciones pueden producir infertilidad


La cauterización es un término clínico usado para describir la quemadura de una parte del cuerpo con el fin de destruir un tejido alterado. En ocasiones son actos médicos que no están exentos de abusos y sobre-abusos, riesgos y complicaciones.

Si hablamos del aspecto ginecológico, en la actualidad es muy frecuente la práctica de la cauterización del cuello uterino de manera innecesaria, dejando muchas veces cicatrices que dañan este órgano, especialmente cuando afecta el canal cervical. Esta realidad se fomenta a diario de manera inescrupulosa entre los centros de salud, movidas más por la retribución económica que por la salud de la población femenina.

Para explicar sobre esta problemática de salud pública, el doctor Julio César Dueñas Chacón, director de la Clínica de Fertilidad PROCREAR, expresa lo siguiente: “la cauterización debe ser la última opción si queremos tratar lesiones en el cuello uterino porque podemos dañar su estructura perjudicando a futuro la salud reproductiva en la mujer”.

“Si bien el procedimiento es ambulatorio, indoloro, y rápido, donde se introduce el espéculo y previa asepsia y antisepsia, se realiza la intervención con un equipo llamado electrocauterio que conectado a la corriente eléctrica genera una acción abrasiva sobre dichas heridas produciendo la quemadura de las mismas, luego sigue un protocolo de reposo físico y sexual”, explica Dueñas Chacón.

Pero a menudo se abusa de este tipo de actos, los médicos a cualquier lesión en el cuello uterino, inmediatamente proponen y cauterizan de forma indiscriminada a veces sin tener la experiencia médica suficiente pudiendo caer en una negligencia. “Al momento de cauterizar esta podría darse cerca o en el mismo  canal cervical, generando una cicatrización que cerraría dicha vía, causando una barrera en el traslado de los espermatozoides camino a la fecundación”, señala el especialista.

La infertilidad en estos casos podría ser irremediable, por ello la importancia de detectar las lesiones del cuello uterino a tiempo a través de un chequeo integral ginecológico, que por intermedio de una prueba llamada Colposcopia podría detectar las diferentes lesiones de este órgano y serían tratadas de manera oportuna. “La primera opción es la administración de medicamentos para curar las infecciones que a mediano plazo producirán la cicatrización natural de las lesiones cervicales,  en ciertas oportunidades el mismo sistema inmunológico combate estas lesiones, siendo necesario solo controles periódicos, por ello se debe realizar procedimientos, como la cauterización del cuello uterino, solo en casos extremos, en especial si la paciente busca un embarazo más adelante.”

lunes, 17 de marzo de 2014

65% de mujeres con infertilidad luchan contra la endometriosis


En la actualidad la endometriosis es considerada como la primera causa de infertilidad femenina, afectando dentro de este grupo a un 65% de mujeres, esta enfermedad en muchas ocasiones no es diagnosticada oportunamente, motivo por el cual es tratado de manera tardía, cuando ya hubieron lesiones graves a las trompas o los ovarios, en muchos casos irreversibles, lo que impediría un embarazo espontáneo en la mujer.

“La endometriosis se origina por un mal funcionamiento de los ovarios, el cual hace que la menstruación tenga coágulos y estos obstruyan el cuello uterino impidiendo la salida natural de la menstruación por lo que el sangrado retorna por las trompas uterinas y llega a la cavidad pélvica produciendo la endometriosis”, señala el doctor Julio Dueñas Chacón, director de la Clínica de Fertilidad PROCREAR.

“La endometriosis puede manifestarse de diferentes formas, cólicos menstruales, dolor durante o después de tener relaciones sexuales,  evacuaciones dolorosas o dolor al orinar durante los períodos menstruales, dolor en la parte baja de la espalda y en la pelvis, entre otros”, detalla el especialista.

En cuanto a la fertilidad femenina, el especialista menciona que, “la endometriosis puede afectar a la paciente distorsionando la anatomía pélvica por la formación de adherencias, obstruyendo las trompas e impidiendo que el espermatozoide alcance el óvulo, o envolviendo el ovario de forma que no puedan liberar un óvulo. Además  la endometriosis altera la implantación del embrión dentro del útero, acumulando liquido inflamatorio en la cavidad pélvica que es tóxico para los óvulos, espermatozoides y el embrión”

Esta anomalía ginecológica se presenta sobre todo en mujeres en edad reproductiva, donde los dos tercios de las pacientes presentan síntomas antes de los 20 años. Una vez diagnosticado, el tratamiento es la laparoscopia, una cirugía mínimamente invasiva que permite eliminar las adherencias, cauterizando los focos endometriósicos detectados al instante, como la causa de este problema es un mal funcionamiento del ovario es importante que luego de la cirugía la paciente lleve un tratamiento que regule la función de sus ovarios para evitar que la enfermedad regrese.

Siendo la endometriosis una enfermedad de difícil diagnóstico es importante que toda mujer a partir de los 18 años se realice un chequeo integral ginecológico en el cual se le podrán diagnosticar múltiples enfermedades de la mujer, entre ellas la endometriosis.

jueves, 6 de marzo de 2014

¿Es posible ser madre a los 45 años?


La maternidad puede sorprender a propios y extraños, más aún si esta llega a partir de los 45 años. Son casos de mujeres que salieron embarazadas, a pesar que para algunas esta situación era improbable. Guiadas por su persistencia y apoyadas en la ciencia reproductiva este sueño de ser madre puede hacerse realidad.

Para el doctor Julio César Dueñas Chacón, director de la Clínica de Fertilidad PROCREAR, cada mujer que busca la maternidad tienen una historia de esperanza diferente, “algunas ya fueron madres en su momento, pero desean alcanzarlo nuevamente, a pesar de tener una edad bastante avanzada, otras en cambio por diferentes razones personales y profesionales retrasaron su maternidad, pero mantienen intacto su anhelo de ser madres”.

Señala que con la llegada de la menopausia, la reserva ovárica en la mujer se ve disminuida casi en su totalidad, reduciendo de manera considerable una futura concepción. “La dificultad para concebir tiene que ver con la reserva ovárica femenina, ya que, a esa edad, los óvulos han disminuido considerablemente en cantidad y calidad. Si a los 20 años de edad, las probabilidades de conseguir un embarazo son de un 25% cada mes, a los 45 años se reducen a menos del 1%, y si el embarazo se logra, el riesgo de aborto espontáneo es mayor. Hasta los 35 años el riesgo es de alrededor del 10%. A los 45 años, es de más del 50%”, manifiesta Dueñas Chacón.

En ese sentido, las clínicas especializadas en reproducción asistida, suelen recomendar a las mujeres mayores de 44 años que quieren tener un hijo utilizar óvulos de donantes jóvenes. “Las probabilidades de embarazo con donación de óvulos son del 60% y las tasas de anomalías cromosómicas son bajas, es mucho más seguro. Previamente se hace una revisión ginecológica y del estado de salud general de la madre para comprobar si podrá llevar un embarazo adelante”, sustenta el especialista.