Desde que se inventó el Dispositivo para cultivo intravaginal de embriones (INVO) en la década del 80, por Claude Ranoux, que consiste en utilizar el cuerpo de la mujer como incubadora natural, donde se coloca óvulos y espermas dentro de una cápsula , que se introduce en la vagina de la paciente donde permanece tres días, periodo en el cual se produce el desarrollo embrionario, esto trajo una serie de ventajas para aquellos pacientes con problemas de infertilidad, que vieron en el INVO una solución sobre todo económica en comparación de otros tratamiento de reproducción asistida.
El tratamiento con el INVO puede disminuir en un 40 a 50% el costo de una Fecundación In Vitro (FIV), con resultados parecidos a ésta. Esto se debe a que en el INVO, la estimulación ovárica es menor a la FIV y por lo tanto el gasto en medicamentos es menor y, el otro gran componente en incremento del costo de la FIV es el uso de un laboratorio de reproducción asistida, que en el caso del INVO no se utiliza, todo en conjunto disminuye el costo del tratamiento y se puede ofrecer una alternativa a las pacientes que tienen dificultades económicas.
Recientemente, un estudio de la Clínica de Fertilidad PROCREAR en nuestro país demuestra que el factor económico no sería su única ventaja. El INVO inicialmente estaba indicado para parejas con infertilidad femenina, por lo tanto, la pareja masculina tenía una buena calidad seminal. Sin embargo esto ha sido mejorado con la innovación planteada por la Clínica de Fertilidad PROCREAR mediante el uso de la microinyección intracitoplasmática de espermatozoides (ICSI), que refuerza las probabilidades de éxito en el tratamiento INVO, en casos de varones infértiles.
“Nuestros resultados sugieren que el procedimiento ICSI-INVO es una opción de tratamiento alternativo eficaz en reproducción asistida que muestra resultados comparables a los reportados por técnicas de fecundación in vitro e ICSI existentes. La tasa de embarazo clínico por ciclo iniciado mediante el método ICSI-INVO fue 45%”, señala el Dr. Roly Hilario Esteban, Especialista en Reproducción Humana de la Clínica de Fertilidad PROCREAR y el innovador del tratamiento del INVO con ICSI.
Cabe indicar que este procedimiento ICSI-INVO mejora la tasa de fecundación entre un óvulo y un espermatozoide y además evita que dos espermatozoides fecunden un óvulo (poliploidía), el cual formaría un embrión no viable para un procedimiento de reproducción asistida.